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La venganza solo ocasiona venganza (incendio del almacen)


Esta historia se empezó a propagar a comienzos de la guerra civil en el otoño de 1932, cuando Cuenca empezó a crecer del tamaño de pueblo al de ciudad. Va sobre un joven llamado Ivan. Él era el típico chico de la época, estudioso, listo, timido y por ello solitario. Todos lo marginaban salvo su familia y los profesores con los que tenía cierta relación de amistad. Carlos, uno de los chicos más atractivos del instituto, era querido y seguido por todos excepto por Ivan, al que le daba igual su reputación.
En un recreo llego a ocurrir una colisión entre ellos dos. Ivan se estudiaba un examen de matematicas junto a su amigo Javi, y de frente venía Carlos con un chica que llevaba una especie de pastel con crema. Ivan entonces sin darse cuenta choco con ellos haciendo que el pastel se estrujara contra la camisa de la joven. Esto por su puesto enfado mucho a Carlos, tanto que estuvo a punto de lanzarle un puñetazo, pero el director, que raramente paseaba por allí le llamo la atención. En el instituto no le podía tocar, por lo que pensó en gastarle una broma al pobre muchacho aprovechándose de su muy baja popularidad.
Otro día ya entrando el otoño, Carlos sabia muy bien la broma que le iba a gastar a Ivan. Se acerco a él para proponerle que quedara con ellos con la excusa de que olvidarían lo pasado anteriormente con la chica. Ivan, debido a que tenía pocos amigos, acepto sin dudarlo un segundo.
POR FIN LLEGO EL GRAN DIA, Ivan estaba preparado para salir con sus nuevos amigos mientras que ellos planeaban la broma. El cielo se presentaba nublado y claramente se podía saber que podía llover en cualquier momento e incluso haber tormenta(excusa que que aprovecharía Carlos para la broma). Quedaron en la parte de la Puerta Valencia y sus planes eran ir a una taberna de la zona en la que había una fiesta. Una vez que le recogieron se dirigieron a los tiradores(donde estaba la taberna).
Al llegar, se podía apreciar un gran cartel en el que se leia ‘’cerrado’’. Entonces Carlos, haciéndose el lastimado, propuso ir al monte, a su granero, a pasar la noche allí ya que estaba empezando a llover y la tormenta empezaba a notarse. A Ivan no le importaba lo de que no hubiera fiesta, ya que solo quería estar con sus nuevos amigos. Pero esta alegría que recorría su cuerpo pronto se acabaría. Al llegar a los afueras de los tiradores(así se llama el barrio y que por aquel entonces eran los limites de Cuenca) Ivan recibió un golpe en la cabeza que lo dejo inconsciente. Uno de la pandilla llamado Miguel no estaba de acuerdo con el trato que iba a recibir Ivan, pero por la presión al final no tuvo mas remedio que seguir ordenes de los demás.
Horas mas tarde, el cielo estaba totalmente nublado y la lluvia y los rayos predominaban en él. Ivan despertó minutos mas tarde de que estos, para calentarse, hicieran una pequeña hoguera al lado del granero. Él pedía ayuda y pedía que le liberaran, aunque Ivan no sabia que estaban por la zona. Lo ataron por la cintura y los pies con cadenas, cada una con su candado.

Pasaban los días y Ivan seguía insistiendo en pedir ayuda y comida, pero nadie acudia a socorrerle, aunque lo escucharan. La lluvia no dejo de caer en todo este tiempo y la tormenta parecía empeorar por momentos. Dos de los cuatro de la pandilla dejaron Ivan al cuidado de otros dos mientras estos primeros se iban a disipar las dudas de los ciudadanos que estaban preocupados por el estado de este. Dijeron que dejaron a Ivan volver a casa solo tras dormir en casa de Carlos, teoría desmentida por la criada de la casa.

Ivan no paraba de pedir ayuda, estaba desesperado y solo paraba unos minutos en los que murmuraba como si se dirijiera a algo o a alguien. Miguel (el chico que no estaba de acuerdo con el plan) estuvo apunto de liberarlo, pero al instante un puñetazo le golpeo en la cara. Era Carlos. El no quería liberarlo ya que quería que sufriera hasta el punto de que le respetara tanto que le besara los pies.
De pronto, un rayo cayó chocando con la tierra cerca de allí. Todo se estremeció y un gran silencio hizo que todos se pusieran a cubierto. El rayo había chocado con un árbol que se encontraba a menos de 2 m del almacén. Entonces empezó a arder todo. Los chavales no sabían que hacer pero solo pensaban en irse de allí. Miguel, de nuevo intento ayudar a Ivan pero entre todos le convencieron de que era un suicidio, porque la estructura era de materias poco resistentes al fuego, aunque se le hubiera podido salvar.
Pronto llegaron los bomberos y los ciudadanos de la zona a apagar las llamas, pero la tragedia era evidente.
Se dice que tiempo mas tarde 3 de 4 delos de la pandilla murieron como Ivan, todos en incendios que se dieron en distintos tipos de lugares. La gente, como siempre, ha pensado mal de estas cosas, y en este caso pensaron que podían deberse los incendios a la venganza. De hay saldría la leyenda del chaval cuyo título, puesto por los conquenses, es ‘’la venganza solo ocasiona venganza’’
Unos dicen haber visto el fantasma del chico por la zona que sigue ardiendo en llamas, mientras que otros dicen que años mas tarde a la guerra civil se encontró un diario terrorífico que narraba el sufrimiento del chaval y que podía haber sido escrito por el mismo.



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